En primer lugar, debes saber que la Voz sobre IP (VoIP) requiere una cierta cantidad de ancho de banda para funcionar correctamente. Esta es la tasa de transferencia de datos y se mide en bits por segundo (bps).
Generalmente, esta cifra se calcula con una tabla con base en el tipo de códec utilizado. Te sugerimos utilizar esta herramienta para realizar la medición. Sólo debes introducir el número de llamadas y el Códec ¡y listo!
En consecuencia, cuanto mayor sea el ancho de banda que dispongas, mejor es la calidad de audio; asimismo, cuanto menos ancho de banda poseas, peor será la calidad de la llamada.
La tasa de transferencia de datos mínima para establecer una comunicación “viable” suele estar, entre los 42kb/seg (20.8kb/seg con G.723) (unos 5 KB/seg); mientras que para una conexión GPRS suele rondar los 40kb/seg de subida, con lo que utilizando este códec, una conversación podría ser viable.
En esta entrada sobe la Velocidad de bajada y de subida, te explicamos en detalle cómo calcular el ancho de banda en redes fijas y móviles, de acuerdo al tipo de conexión.
Finalmente, es muy importante que tengas en consideración que a medida que se realizan más llamadas simultáneas, los requerimientos del ancho aumentan.